Ya van cuatro capítulos de la serie, y en este episodio el amor se ha puesto las pilas. A Sergio le ha salido un duro competidor, Juan Carlos, y no dudará en usar a Avelina para que se decante la balanza a su favor... Mientras que Tomy y Natalia demuestran que sigue la llama de su antigua relación viva, y Carmen se echa un novio de metro noventa bastante cerdo.
Yago y Tomy se encargan de entrar en la casa de Vini y llevar toda la colección al local donde ensayan. Y, cuando están en medio de la venta, se enteran de que uno de los discos de Vini vale doce mil euros. Le preguntan que dónde lo tiene, y él les contesta que se lo regaló a una chica de la que se enamoró: la "prima" de Natalia, Margot. Claro, cualquiera le quita el susto a Natalia, porque ni es prima suya ni es nada, es una chica de compañía que contrató hace años para que alejara a Vini de la caja del grupo.
Sergio sigue utilizando la técnica de "pico y pala" con Sara, y la mayor parte del trabajo la hace como Avelina, claro. Cuando están en el colegio hablando, Carmen suelta una bomba: tiene novio, un pedazo de chico de metro noventa que ha conocido en el gimnasio. Pero claro, luego, cuando Sara está tomándose algo con Juan Carlos al lado del gimnasio de Carmen, ve al novio de la directora dándose el lote con otra chica, y decide llamar a Avelina y entrar a investigar.
Le pillan después de un rato en el almacén con una chica, y Sara saca el móvil y empieza a grabar. Pero Sergio, que está deseando volver con Sara, se deja llevar a pesar de ir vestido de Avelina y mira a Sara acaramelado perdido, se acerca lentamente a ella... y al apartarse, caen todas las pelotas colocadas en la estantería sobre la pareja. La chica resulta ser Carmen, por lo que cortan el vídeo y salen corriendo antes de que la directora y el novio les pillen.
Volviendo al tema que nos ocupaba antes, habíamos dejado a Natalia intentando contactar con su "prima" Margot. Consigue llamarla, pero claro, cuando la chica se entera de que Vini tiene una increíble colección de discos de vinilo, y que el que ella tiene vale doce mil euros, le propone al bajista casarse para quedarse con el dinero. Y Natalia se ve obligada a contarle a Tomy, a Yago y a Chloe que Margot no es su prima. De hecho, la primera en saberlo es Chloe, que se encargará de sacarle a Vini dónde está el disco de los doce mil euros con un numerito en el ascensor bastante cómico.
Pero Tomy y Natalia todavía tienen muchas heridas abiertas, y una de ellas es su traumática ruptura. Tomy quiso darle un disco con dedicatoria para disculparse con ella cuando le encontró en la cama con un montón de chicas, pero Yago se equivocó de disco y le dio uno cuyo título decía todo lo contrario. Pero cuando Tomy se entera de que Margot no es prima de Natalia, le dice a la manager que jamás volvería a salir con ella, que es una mala persona y que no querría estar con alguien así. Natalia le contesta que ella tampoco querría volver a salir con un inmaduro como él.
El final del capítulo hace (como siempre saben hacer los creadores de la serie) que te muerdas las uñas hasta el siguiente lunes: Carmen termina pillando a su novio con otra, y le tira un cubo de hielo por encima después de enfadarse con Sara y de amenazar a Avelina con echarla a la calle porque el vídeo de ella con el otro acaba en los móviles de todos los niños; Vini corta con Margot y Natalia, para disculparse, le presenta a una prima suya de verdad; y Sergio firma los papeles del divorcio pero Sara los "traspapela" gracias a Nora, lo que le hace ver a Sergio que todavía tiene posibilidades de volver con ella.
Sergio sigue utilizando la técnica de "pico y pala" con Sara, y la mayor parte del trabajo la hace como Avelina, claro. Cuando están en el colegio hablando, Carmen suelta una bomba: tiene novio, un pedazo de chico de metro noventa que ha conocido en el gimnasio. Pero claro, luego, cuando Sara está tomándose algo con Juan Carlos al lado del gimnasio de Carmen, ve al novio de la directora dándose el lote con otra chica, y decide llamar a Avelina y entrar a investigar.
Le pillan después de un rato en el almacén con una chica, y Sara saca el móvil y empieza a grabar. Pero Sergio, que está deseando volver con Sara, se deja llevar a pesar de ir vestido de Avelina y mira a Sara acaramelado perdido, se acerca lentamente a ella... y al apartarse, caen todas las pelotas colocadas en la estantería sobre la pareja. La chica resulta ser Carmen, por lo que cortan el vídeo y salen corriendo antes de que la directora y el novio les pillen.
Pero Tomy y Natalia todavía tienen muchas heridas abiertas, y una de ellas es su traumática ruptura. Tomy quiso darle un disco con dedicatoria para disculparse con ella cuando le encontró en la cama con un montón de chicas, pero Yago se equivocó de disco y le dio uno cuyo título decía todo lo contrario. Pero cuando Tomy se entera de que Margot no es prima de Natalia, le dice a la manager que jamás volvería a salir con ella, que es una mala persona y que no querría estar con alguien así. Natalia le contesta que ella tampoco querría volver a salir con un inmaduro como él.
El final del capítulo hace (como siempre saben hacer los creadores de la serie) que te muerdas las uñas hasta el siguiente lunes: Carmen termina pillando a su novio con otra, y le tira un cubo de hielo por encima después de enfadarse con Sara y de amenazar a Avelina con echarla a la calle porque el vídeo de ella con el otro acaba en los móviles de todos los niños; Vini corta con Margot y Natalia, para disculparse, le presenta a una prima suya de verdad; y Sergio firma los papeles del divorcio pero Sara los "traspapela" gracias a Nora, lo que le hace ver a Sergio que todavía tiene posibilidades de volver con ella.
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