Garrett Douglas nos fue presentado en el primer capítulo de la temporada como un profesor nuevo en el instituto. Un profesor muy guapo pero que daba muy mala espina. Y en este episodio hemos podido comprobar que nuestro instinto no fallaba.
El episodio comienza con él dando una clase con una tos bastante fuerte y, todo hay que decirlo, bastante poco común. En esos ataques de tos el profesor va recordando cosas, todas relacionadas con él en una especie de cápsula de una especie de gelatina verde muy rara y él saliendo de ella. Cuando la tos se hace insoportable se va a una sala contigua de la clase a respirar helio (sí, tan raro como parece) y, antes de que la cabecera salga, se puede observar que se le ponen los ojos rojos como si fuese un alfa.
Con Douglas comienza y termina el episodio pero, durante toda la parte central se desarrollan otros temas que también nos importan bastante. Y, sin duda, el más relevante es que Stiles sigue sin ser recordado.
Con el corazón en un puño presenciamos durante todo el episodio como sus tres amigos buscan pistas sin parar para saber qué es un Stiles. Es su propio padre el que les dice que es una persona, ya que su padre se apodaba así. Parece el primer signo de reconocimiento por parte del Sheriff, sin embargo no es más que una pista que lleva al grupo de amigos a hablar con el padre de Stilinski, a pesar de su negativa al respecto.
El abuelo de Stiles sufre de demencia, y parece que no va a servirles de mucha ayuda, sin embargo, con la ayuda de Lydia y las matemáticas, consiguen un momento de lucidez, interrumpido por el Sheriff. Pero cuando parece que todo está perdido, el anciano le suelta que su mujer está muerta y que su hijo es un perdedor. Sólo lo escucha el Sheriff, pero es suficiente para que eso despierte cierta curiosidad en él.
Otro tema, que sin duda, es el tema central de toda la temporada, son los jinetes. Y los encargados de luchar contra ellos durante este episodio son Liam, Mason, Corey y Hayden. Tras la desaparición de una nueva chica, a la que sólo recuerda su hermana, intentan salvar a ésta última. El plan no le sale del todo bien y lo que en principio iba a ser una fiesta para mantener a salvo a la chica, se convierte en un escenario de guerra en el que todos los presentes observan a un jinete debido a que Corey le hace visible. Y, cuando alguien ve a un jinete, sabe que será la próxima víctima.
Sin embargo en este episodio también hace su aparición Argent, que investiga un caso, con la ayuda de Melissa McCall, de unas mordeduras de hombre lobo en cráneos a los que les falta un elemento común: la glándula pineal. No es hasta el final del episodio cuando descubrimos que el causante de tantas muertes es nuestro guapo profesor del inicio del episodio.
Nuestros protagonistas, ajenos a estos, descubren que el problema con los jinetes se acaba de hacer más fuerte. Y el Sheriff, con sus dudas con respecto a lo que le ha dicho su padre, decide hablar con Scott. Es entonces cuando le cuenta que ha tenido un sueño muy real en el que habla con su esposa sobre el nombre de su hijo, y ella le respondía que se llamaría Stiles de todas formas. Y en ese momento se puede ver cierto reconocimiento en la cara de Scott.
Tendremos que esperar hasta la semana que viene para ver si finalmente Scott ha conseguido recordar a su amigo, qué pasa con los jinetes y ver si el profesor Douglas es descubierto. Un montón de incógnitas pero, ¿cuál es la que más os interesa averiguar a vosotros?
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