ShowTime Con 2: el éxito que aplacó la decepción

La cancelación de Matthew Daddario y Harry Shum Jr. para la convención de Zarata Events que tendría lugar en Barcelona el pasado 25 y 26 de marzo, fue un duro golpe. Las fans estábamos preparándonos emocionalmente para verlos ese mismo fin de semana y, tres días antes, su aparición al evento se hizo imposible por rodaje. De este modo, una convención que inicialmente iba a reunir a cuatro series (Outlander, Shadowhunters, Teen Wolf y Los 100), acabó siendo una convención de dos series y tan solo tres invitados.

Pese a todo, era demasiado tarde para echarse atrás y todavía había gente por la que merecía la pena ir. La duda era, ¿serían capaces de rellenar los huecos que habían dejado los otros dos invitados? ¿Serían capaces de hacernos olvidar su ausencia?

Con lo poco que sonríe Bellamy y lo bonita que tiene la sonrisa Bob.

El viernes, mientras se hacía el registro y se cambiaban las fotos, autógrafos y extras de Shadowhunters, era difícil no pensar en ello. Ellos eran una de las principales atracciones de la convención y no estaban. Pero, con el nuevo horario en mano, parecía que no iba a haber tiempo para aburrirse.

El sábado todo dio comienzo. Los nervios estaban ahí a medida que nos acercábamos al hotel y tomábamos asiento en la sala de los paneles para ver el primero de todo el fin de semana. Bob Morley (Bellamy en Los 100) sería el encargado de dar el pistoletazo de salida a los paneles, y lo haría a lo grande.

Holland desayunando en uno de los paneles.

Bob Morley fue una de esas sorpresas que nos depararía el fin de semana. Respondió educadamente a todas y cada una de las preguntas que todas las fans (que no eran pocas, ya que en cada panel muchas de ellas quedaban fuera por falta de tiempo) le hicieron a lo largo de los 5 paneles que tuvo durante todo el fin de semana. Gracias a esas respuestas supimos de teorías de la serie y avisó que el final de la cuarta temporada, que se emite actualmente, iba a ser muy oscuro. Y la gran confesión de la convención fue que si tuviese que revivir a un personaje sería Pike. Y cuando toda la sala gritaba "no" el añadía que era por eso que quería su vuelta, porque le odiábamos. Fuera de los paneles recibió con sonrisas y abrazos a las fans, tanto en las firmas como en los PhotoOps. Y nos deleitó con su voz original (sí, la suya, no la que pone para interpretar a Bellamy).  

Pero no fue la única. Bob estaba dispuesto a hacernos olvidar la ausencia, pero también lo estaban el resto. Holland Roden (Lydia en Teen Wolf) fue la otra gran protagonista del sábado. Respondió preguntas sobre su similitud con el personaje al que interpreta en Teen Wolf, sobre el cast de la serie (al que considera casi como una familia), sobre cómo es besar a Dylan, algo que no es exactamente como todos pensamos, y nos deleitó con su conocimiento del español. Fue auténtica, divertida y muy natural.

Thomas McDonell mostrando su encanto.

El día se resumía en ellos dos, aunque Thomas McDonell (Finn en Los 100) estuvo por ahí haciéndose un par de fotos grupales, no sería hasta el día siguiente cuando tendría su protagonismo. 

El domingo sería el último día de la convención y sería cuando, nosotras, veríamos a Thomas McDonell por primera vez y al resto por última. No sabíamos qué esperar.

Muchos sabréis por qué lo decimos. Thomas McDonell no podía dar tanto juego como Bob Morley (por razones evidentes para los que lleven la serie un poco al día), y quizá por eso tuvo menos protagonismo pero, en cuanto lo vimos en su primer panel, nos olvidamos. Thomas hizo de su panel, el más gracioso de toda la convención. Respondiendo con su humor particular preguntas sobre el presente y pasado de la serie, personajes favoritos y, lo más importante, sobre su twitter. Su cuenta de twitter tiene tweets de lo más extraños, tanto que era fruto de rumores sobre si podía haber sufrido un hackeo. Pero el actor lo negó y afirmó que era suya (sacando una foto que prometió subir pero que no hizo).

Momento de interacción entre Bob y Thomas en su panel conjunto.

El único panel conjunto de dos actores (Bob y Thomas, el de Los 100), después de esto, prometía. Era el último, el broche final para cerrar la convención, y fue tan divertido (o más) como el de actor que interpreta a Finn en solitario. Ambos fueron divertidos respondiendo a sus preguntas, haciendo reír a las fans e incluso halagándolas, hablando de las maravillas de España. 

A estas alturas, la ausencia de Matt y Harry desapareció. Habíamos disfrutado de una gran convención con unos actores de lo más cercanos. Quizá hubiese sido mucho mejor con estas dos presencias, pero no se puede negar que, pese a todo, Bob, Thomas y Holland consiguieron hacernos olvidar el mal trago. Y nos hicieron pasar un gran fin de semana que nos será difícil olvidar.