Nerve: un juego sin reglas, Henry Joost y Ariel Schulman

Título original: Nerve
Directores: Henry Joost y Ariel Schulman
Año: 2016
Duración: 96 min.
Géneros: Aventura, Crimen, Misterio
País: Estados Unidos
Actores: Emma Roberts, Dave Franco, Emily Meade, Miles Heizer, Juliette Lewis, Machine Gun Kelly

 Tráiler:

¿Por qué ver Nerve?
• Rompe con los personajes a los que estamos acostumbrados.
• El argumento sorprende con bastantes giros.
• Tiene momentos de pura risa, y otros de absoluta tensión.

Vee (Emma Roberts) es una adolescente en su último año de instituto. Es una chica tranquila, aficionada a la fotografía, responsable y muy poco aventurera, quizá hasta aburrida. Un día, cansada de que sus amigos crean que no es capaz de arriesgarse, decide empezar a jugar a Nerve, un juego online donde los observadores (aquellos que pagan por ver a los jugadores), ponen retos a quien se arriesgue a jugar. Si cumples el reto, ganas dinero. Si lo pierdes o te rindes, te quitan lo que has ganado y te quedas fuera.

En su primer reto, conoce a otro jugador, Ian (Dave Franco), con el que tiene colaborar cuando pasan de jugar para divertirse... a jugar para sobrevivir. 

A partir de ahí, las vidas de Ian y de Vee se ven conectadas en un mundo donde Internet tiene el control de todo de un modo feroz y peligroso, a través del arma más potente que ellos mismos han puesto en sus manos: la información.

Esta película, probablemente, ha sido una de las más infravaloradas de todo el año 2016. Críticas muy duras y puntuaciones muy bajas para una historia que ha conseguido dar la vuelta a todos los tópicos y que, de alguna manera, busca enseñar a los jóvenes hasta dónde llega la privacidad en Internet.

Lógicamente, la película tiene, en mi opinión, sus fallos. Para empezar, cosa con la que estarán de acuerdo todos los fanáticos del doblaje como yo, los dobladores podrían haber hecho mucho mejor trabajo. En algunos momentos, las voces transmiten muy poco la emoción que sí que clavan Emma Roberts y Dave Franco como actores, lo que saca completamente de la historia.Y la banda sonora, aunque cumple su cometido, no es de las mejores de Hollywood.

Ahora bien, no podrían haber contado mejor la historia. Recurren de manera muy acertada a planos subjetivos, a imágenes de teléfonos y al ojo de pez, en auge desde la aparición de las cámaras deportivas.

Desgraciadamente, ha pasado demasiado desapercibida para lo bien que está y los actorazos con los que cuenta. Y el final deja boquiabierto, perfecto para reflexionar sobre hacia dónde vamos con las nuevas tecnologías, cada vez más imprescindibles en la vida cotidiana. ¿Crees que George Orwell no iba desencaminado cuando escribió 1984? Esta película lo demuestra. ¿Vas a perdértela?

Puntuación: