Lejos de darnos una temporada memorable, The Walking Dead nos da una de cal y una de arena cada semana. Si la semana pasada pasó poca cosa, en este capítulo la serie vuelve a coger carrerilla, esperamos que para sorprender en lo que es ya la recta final de la temporada. Tan solo quedan cuatro capítulos para el final y los personajes nos están preparando ya: intriga, traición y la visión de un futuro mejor. Todo esto se podrá encontrar en este capítulo.
Para comenzar, mejor remontarnos al final del 8x11 donde Negan dejaba vislumbrar la genial idea que le dio Eugene para acabar con sus problemas. Dicha idea empieza a materializarse al principio de este capítulo con todos Los Salvadores untando hachas, cuchillos y la indispensable Lucille en tripas recién extraídas de los zombies. La intención es herir a los habitantes de Hilltop sin matarlos para que se infecten, se conviertan, el resto se asusten y vuelvan a rendirse ante Negan.
Sin embargo los habitantes de Hilltop parecen más dispuestos a luchar que nunca. Rick, tras un rato pasado en las tumbas que tanto conocemos, quiere hacer creer a Daryl que ya está listo para terminar con todo. Por su parte, su amigo intenta justificar sus acciones de la primera mitad de temporada, en la que el paso en falso que supuso intentar acelerar el plan, acabó con más vidas de las deseadas. Pese a que a Rick no le hizo gracia en su momento, comprende a Daryl y nos sorprende a todos afirmando que hizo lo que debería haber hecho él: poner a los suyos por encima de los demás.
Mientras tanto, Dwight se ha vuelto a colar en las filas de Los Salvadores, aunque no sin consecuencias. Simon le vigila de cerca y le hace ir con él para asaltar Hilltop. Parece que es desconfianza, porque así evitará que Dwight haga lo que está pensando: avisar a los otros del nuevo plan.
La líder de Hilltop por otro lado recibirá un mensaje fuera de las vallas del pueblo en el que pedirán discos a cambio de la clave de la supervivencia en el futuro. Pese a que es un poco reacia al principio, Michonne se encargará de ver eso como una oportunidad que no pueden dejar escapar. Porque aunque parece bueno, podría ser verdad. Así es como las protagonistas femeninas de la serie (Maggie, Rosita, Michonne y Enid) van hasta las coordenadas citadas y conocen a Georgie, una mujer que no parece vivir en pleno apocalipsis zombie porque es demasiado buena. Ellas han vivido demasiado y, puestas a no correr riesgos, se llevan a la mujer y a sus dos guardaespaldas a Hilltop hasta que decidan si hacen el trato o no. Total, ya saben donde viven...
Todas estas tramas complementan bastante decentemente la trama principal que es lo que verdaderamente hace lucirse a este capítulo: un enfrentamiento real entre Negan y Rick. Porque en su camino a Hilltop, Rick ve a Negan y se estrella contra su coche. Dejando al resto de Salvadores confusos, comienza una persecución de película de acción entre Negan y Rick. Será el segundo el que parezca ir ganando la mayor parte del tiempo:dispara al coche de Negan mientras huye, cuando se le acaban las balas recurre a su hacha y consigue que Negan se de varios golpes que tienen mala pinta. Aunque como dice el refrán, bicho malo nunca muere. Negan saldrá vivo de todas esas situaciones y mientras mantendrán una conversación en la que Negan le ofrecerá un trato al líder de Alejandría (trabajar para él de nuevo, dándole solo el 25% y saliendo con vida) y Rick le descubrirá que Simon en realidad mató a todos los del Vertedero. Y esto no le gusta mucho a Negan, aunque menos le gustará que Rick coja a su preciada Lucille.
Con su líder desaparecido, Simon se pone al mando de Los Salvadores y el hombre no parece muy dispuesto a perder su liderazgo. Por eso, cuando encuentren el coche de Negan, convencerá a Dwight con palabras bonitas para que no busquen más a su líder. Aunque el intento de copia de Daryl no tardará en darse cuenta de que no eran más que mentiras. Simon dirá al resto de Salvadores el nuevo plan, y no es asustar a los habitantes de Hilltop, es exterminarlos.
El grupo de Georgie sigue en Hilltop y Maggie tiene que decidir pronto. Ellas tienen una furgoneta llena de provisiones que les vendrían bien, y Enid es bastante partidaria de quedarse con todo y echarlas. Aunque Michonne sabe que es fruto del cabreo que tiene la chica por la muerte de Carl (todavía, y siempre, presente), por lo que acabará encauzando la situación y haciendo que Maggie llegue a un trato que será recompensado. Georgie aceptará un cuarto de lo que pedían y les darán provisiones además de la famosa clave para sobrevivir en el futuro: un libro con inventos medievales, planos e inventos que tendrán que volver a construir para alcanzar una sociedad mejor. Entregarán eso y una promesa: volverán para comprobar cómo estará todo.
No todo será tan bonito. Negan y Rick seguirán luchando con una Lucille a la que Rick prenderá fuego y un montón de zombies que el líder de Alejandría intentará usar en contra de Negan. Todo será trepidante hasta que Negan desaparezca. Lo último que veremos es que no está muerto, sino en un coche, conducido por Jadis, que le apunta con una pistola y que le golpea.
Ha sido un episodio que en líneas generales vuelve a ser bastante bueno, manteniendo la intriga y mostrándonos un poco de aquello que queremos ver: la lucha entre los líderes. Aunque la serie sigue su ritmo pausado, algo que no le está beneficiando, tan solo quedan 4 capítulos de esta temporada y esperamos que cierren la trama de Negan de la mejor forma posible.
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