La serie más esperada del verano no nos pretende dar ni una semana de tregua y, a cada capítulo, las cosas se ponen más y más interesantes. Y, debo decir, la serie se supera más. Podemos ver cosas que esperábamos y cosas que no tanto pero que nos dejan con la boca abierta.
El capítulo empieza más o menos donde lo dejamos la semana pasada, con el ejército Lannister (con ellos terminaremos también el capítulo, pero tendréis que esperar para descubrir por qué). Jamie está cogiendo el dinero que han robado después de acabar con los Tyrell y le está dando una cantidad a Bron. El resto irá para el banco de hierro.
Con el representante del banco del hierro está Cersei. El dinero de los Tyrell dará de sobra para pagar la deuda que tenían los Lannister y servirá para tenerlos de aliados y hacer unas cuantas ampliaciones en ejército y flota. Porque Cersei se prepara para la guerra, no cabe duda.
En el norte, recordemos que Bran Stark ya llegó a su hogar, aunque no era del todo él. En este capítulo mantiene una conversación con Meñique, que le regala la daga con la que Cersei Lannister intentó matar al joven Stark (enviando un emisario en la temporada uno). Bran acepta el regalo y deja confuso a Meñique cuando le dice que "el caos es una escalera". Una frase que, al parecer, decía su difunta madre a Meñique. Con esto, está demostrando que sí que es verdad que sabe más cosas de las que parece.
Pero Bran, como hemos podido comprobar, ha cambiado mucho desde que es el cuervo de tres ojos. Tanto que cuando Meera, su acompañante a lo largo de toda esta travesía, le dice que se debe marchar para estar con su familia cuando los caminantes lleguen, le da bastante igual. Y la chica alucina, claro. Pero Bran se ampara en que ya no es Bran Stark, es el cuervo de tres ojos.
En Invernalia continuamos, porque Arya Stark está de vuelta, aunque nadie la cree. Pero finalmente se camela a los guardias y, al final escapa a la tumba de su padre. Y cuando los guardias se lo dicen a Sansa, ella ya sabe dónde buscar y se produce otro reencuentro Stark. Ambas hermanas se abrazan y se dan cuenta de cuánto han cambiado ambas el tiempo que han estado separadas.
Arya también se reencuentra con Bran, aunque el reencuentro no es tan emotivo como el que tiene con su hermana. El chico le da la daga de Meñique y acaba diciéndole que ve cosas. Y a Arya le queda bastante claro que su hermano ahora es un poco rarito.
Seguimos con Rocadragón. Jon Nieve sigue necesitando la ayuda de Daenerys, que accedió a darle el vidriagón. Pero el bastardo, lejos de contentarse con eso, va a enseñarle a la mujer qué es lo que va a darle y, de paso, enseñarle unos dibujos de la pared que muestran que los caminantes existen. Daenerys parece convencida y le dice "lucharé por vos, lucharé por el norte" (la declaración de amor que estaba esperando ha llegado)... Pero si hinca la rodilla. Y parece que el rey en el norte se niega a hacerlo.
Daenerys también se entera entonces del problema de Roca Casterly (han destruido sus naves y los Inmaculados no podrán salir de ahí) y, aprovechando que tiene a Jon rondando, le pide consejo. El chico le dice que no use a los dragones para destruir si no quiere ser como el resto de reyes de Poniente. Si le hará caso o no, será algo que descubramos al final del capítulo.
En Invernalia, Brienne ve como su promesa hacia lady Stark se está cumpliendo y sus hijos se están reencontrando. Arya sabe algo al respecto de ella y de cómo venció al Perro así que, acaba luchando con ella. Y Sansa observa desde arriba cómo su hermana ha cambiado: sabe luchar, tiene una lista de gente que quiere matar y Cersei está la primera en ella.
Otro reencuentro que se produce, aunque no tan dulce, es el de Theon Greyjoy y Jon Nieve. Ambos se llevaron bien pero no después de que Jon supiera que entregó al Norte por su propio beneficio. Así que se da un momento de bastante tensión en el que Theon sale con vida solo porque ayudó a Sansa. Pero Theon no está ahí para hablar con Jon, sino con Daenerys, a la que quiere pedir ayuda para rescatar a su hermana. Pero Daenerys no está.
Porque la Targaryen se ha ido a por el ejército de los Lannister a lomos de uno de sus dragones para protagonizar una de las batallas más épicas de la serie. Con ella van los Dothrakis y, entre ellos y el fuego del dragón, caen unos cuantos Lannister. Pero no van a salir tan impunes como parece, porque Bron intenta matar al dragón de Daenerys y, cuando cae al suelo y la chica está intentando quitarle la lanza, Jamie intenta lo mismo con ella. Pero el dragón actúa rápido y echa fuego en su dirección. Alguien actúa más rápido tirando a Jamie al agua, salvándole en el último momento. Y Tyrion ve todo esto desde una colina. Ve como la persona que ahora sigue intenta matar a parte de su familia.
Con esto acaba un episodio intenso de Juego de Tronos. Queda menos para que termine la temporada y no estamos preparados para ello. Es la más corta de la serie hasta el momento y cada capítulo está mereciendo la pena. ¿Con qué nos sorprenderán al final?
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