10 días son los que quedan para la llegada del Praimfaya. La cuenta atrás corre más rápido que nunca y no hay tiempo para buscar cómo sobrevivir. Por el momento en el laboratorio de Abby experimentarán con un terrícola que supuestamente atacó a Emori.
El chico ha respondido bien a la sangre nocturna, lo que es una buena señal para el siguiente paso del proceso: meterle en la máquina de radiación. Parece que todo va bien. La potencia va aumentando y no observan ningún cambio visible ni interno; y así supera el nivel de radiación de la lluvia ácida. Pero en cuanto pasan ese nivel se empiezan a ver unos cambios que harán que muera en unos segundos de agonía y dolor.
Por otro lado, en Arkadia, Jasper sigue dando todo por perdido y queriendo disfrutar cada momento de los que le quedan. Es por eso que decide que salir del recinto y exponerse a la lluvia es la mejor opción de todas. Bellamy intentará detenerle pero sin éxito alguno. Y como es tan bueno y protector terminará saliendo con él para que no esté solo por el bosque.
En esta pequeña expedición encontrarán unas nueces alucinógenas, que ya dieron que hablar en la primera temporada, y llevarán unas cuantas de vuelta a Arkadia. Una excusa perfecta para montar una fiesta.
Mientras tanto a Jaha se le enciende la bombilla. Por una vez en toda la historia de la serie parece que su cabeza pensante sirve de algo. Él tiene un símbolo que sirvió para descubrir que había un búnker donde poder refugiarse y sobrevivir; pero cuando llegaron vieron que era inservible. Pues esta vez gracias a Nylah y uno de sus ritos descubre que ese era el búnker erróneo así que tiene que haber otro. Junto con Kane y Monty irán a buscar a Indra y su hija para encontrar el refugio.
Clarke, en el laboratorio, insiste en volver a intentarlo, así como hace su madre. Raven y Luna no están tan de acuerdo porque supone que podría morir otra persona. Emori empieza a temer lo que le viene encima. Y por si fuera poco empiezan a ver cosas que no se corresponden con lo que pensaba. Descubren que Emori les mintió a todos y junto con Murphy les atan y les encierran hasta que se decidan en qué hacer con ellos.
Luna no quiere que sigan usando su médula para matar gente pero tras una pelea con Roan la sedarán y le sacarán sangre en contra de su voluntad. Así mismo cogerán más tarde a Emori para inyectarle la sangre nocturna. En estos momentos sufrí porque Murphy lo pasa realmente mal. Confiesa que quiere mucho a la chia y observamos a un Murphy indefenso que nunca creeríamos ver en algún momento.
Clarke en realidad se siente mal por ello. Ella en realidad no es nadie para hacer lo que está haciendo así que tras una corta decisión se inyectará a sí misma la sangre bajo la mirada sorprendida de su madre. Abby, esa persona que tras ver lo que ha hecho su hija rompe la máquina de radiación así que caput, se acabó experimentar con ello.
Ya para ir terminando nos queda saber qué pasa con Kane y el resto. Al final acaban encontrando a Indra que tras dudarlo mucho les llevará hasta su hija, la guardiana de la llama. A ella le cuentan toda la historia del amuleto. Ellos tienen el de nivel 11 pero necesitan uno superior para encontrar lo que Jaha cree que es el búnker bueno en el que podrán vivir. Lo malo de todo es que ese búnker está en una zona protegida por los Azgeda.
Como os imagináis acaban entrando y llegando a la tumba del primer comandante, donde se encuentra el refugio. Ahora solo les queda averiguar cómo abrirlo. Aquí es cuando Monty, la inteligencia en persona, recuerda de nuevo el rito de Nylah. Echan en el amuleto el fuego y consiguen lo que es la llave definitiva para abrir la compuerta que se encuentra en el suelo.
¿Será esta vez el búnker que hará que la especie humana sobreviva? ¿Qué creéis?
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