Menú

martes, 5 de julio de 2022

Así empieza 'La lista final', la conspiración militar de Chris Pratt y Prime Video





Título original: The Terminal List
Creador: David DiGillio
Año: 2022
Género: Thriller. Acción
País: Estados Unidos
Actores: Chris Pratt, Taylor Kitsch, Constance Wu, Jai Courtney, Riley Keough, Jeanne Tripplehorn, LaMonica Garrett, Christina Vidal, Alexis Louder, Tyner Rushing, Remi Adeleke, Arlo Mertz, Miram A. Murray




Tráiler:


¿Por qué ver La lista final?
• Por la curiosa trama basada en el libro de Jack Carr
• ¿Lo malo? Demasiados capítulos para una historia tan corta
• ¿Otro punto negativo? La trama se vuelve confusa según avanza la serie


Prime Vídeo ha arrancado el verano por todo lo alto con su lista de estrenos. Hace poquito, lanzaron la esperada serie juvenil El verano en que me enamoré, con el característico toque de drama-comedia romántica; y el viernes le tocó el turno al otro género favorito estadounidense, el policíaco, bajo el capitaneo de Chris Pratt.

La lista final es una miniserie de ocho capítulos cuya trama es todo un clásico, aunque con una pequeña vuelta de hoja: el comandante James Reece (Chris Pratt) vuelve a casa después de que una peligrosa misión en Oriente Medio fracase, dejando doce bajas de los doce Navy SEAL que componían su pelotón. Evidentemente, hay una investigación interna, pero Reece piensa que las fuentes oficiales de la investigación forman parte de una conspiración contra los SEAL que intentaban llevar a cabo la operación Espada de Orión. ¿Tiene razón o delira después de los traumáticos acontecimientos de Irán?

Ahí termina toda la trama. Es decir, obviamente los creadores de la serie decidieron sumar un cliché más y Reece toma cartas en el asunto, coge a un amigo suyo, Ben (Taylor Kitsch) que es ex-militar y se ponen en plan justiciero con investigaciones a golpe de tecnología punta e instrumentos y tácticas militares, pero son ocho capítulos de una hora para responder a esa pregunta. Y todo lo que va pasando desde que el comandante vuelve a Colorado es una sucesión de trágicos acontecimientos que solo emborronan la respuesta.

Y, por supuesto, no podía faltar en el elenco de profesiones las tres claves de toda buena serie americana: un militar (más de uno, en este caso), una agencia federal (que le toca la papeleta al NCIS porque es una investigación militar) y una periodista, Katie (Constance Wu), comprometida con la defensa de la libertad y los valores estadounidenses y dispuesta a destapar las negligencias militares. O eso es lo que dicen al principio en la serie, según avanza no se sabe muy bien si es una defensora de derechos o una oportunista que quiere conseguir la exclusiva.

Podría decirse que son los tres protagonistas de La lista final, pero sería excesivo. Ni Kitsch ni Wu aparecen en pantalla más de diez minutos por capítulo, lo que nos deja con cincuenta minutos completos de Chris Pratt haciendo de militar, persiguiendo delirios que ni contrasta, con las clásicas escenas de pelea y con un tinte serio y dramático que la serie consigue a golpe de fotografía: colores fríos y muy poca iluminación en el presente, colores cálidos y vivos en los flashbacks. Novedad.

Pero ¿cuál es el verdadero problema de la serie? Que la idea de la trama es muy buena. Claro que es buena, está basada en la novela homónima de Jack Carr. Es muy interesante ver, desde la perspectiva de Reece, la dificultad para distinguir entre lo que es real y lo que no, pero es que los de Prime lo han hecho bastante mal. Una cosa es que la ficción refleje la confusión que siente el protagonista y otra muy diferente es que el espectador acabe igual de confuso (o más). Y con diez cambios entre presente y pasado por capítulo, con un colega que lo único que hace es alentar la paranoia de su amigo y con una periodista que vive en su planeta, no se cuenta bien la historia.

No le hace justicia al libro de Carr. Aunque claro, también es lógico: pasar de un libro de cuatrocientas páginas a una película de dos horas y media vale, ¿pero a una serie de ocho horas? Sobran escenas por todas partes. Se hace muy aburrida y pesada porque sobra historia, y ni Chris Pratt, ni Taylor Kitsch ni Constance Wu consiguen mantener a flote el barco que los creadores, guionistas y directores han agujereado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¡Queremos saber tu opinión! Deja en la siguiente caja un comentario sobre qué opinas de la entrada, el blog, o alguna sugerencia: