Vis a Vis: El Oasis 1x03: Como te quiere una madre

Después de tres capítulos podemos decir que Vis a Vis: El Oasis sigue siendo igual de caótica que cuando empezó, pero ahora la menos nos hemos acostumbrado a su montaje. Ya sabemos discernir las tramas que componen las serie para no perdernos. Al menos, no mucho. Y aunque el 1x02 acabó con la trama del hotel, en este empezaremos con algo que le guarda cierta relación: la boda después del desastre.

Víctor Ramala se encuentra en el lugar de la boda, viendo los cuerpos de todos los caídos en la ceremonia. Y aunque hay muchísimos, falta el más importante, el de su hija Katy (Alma Itzel), la novia. Aunque nosotros ya sabemos que está viva, ellos también intuyen que si no hay cadáver... Hay que buscarla. Por eso Ramala le pide a su hijastro Diego (Almagro San Miguel), el que se iba a fugar con ella, que la busque y también al infiltrado que haya dado la información a las atracadoras. Porque un golpe así no se prepara sin alguien dentro. Ese alguien es la hermana de Diego, Mónica (Lisi Linder)... ¿Se dará cuenta Ramala?

Entre medias de esto, volvemos a la línea temporal de la boda y a cómo se les fue todo de las manos. De momento solo habíamos visto que consiguieron los diamantes sin problema alguno. En este capítulo vemos como nuestras atracadoras (todavía en perfecto estado) salen con la novia a punta de pistola mientras todos los invitados (incluido Ramala) están de rodillas en el suelo. Y lo que debería ser una huida sencilla, se complica cuando a Zulema (Najwa Nimri) le da un ataque de locura. Obliga a la orquesta a tocar una canción alegre y se pone a bailar. Mientras tanto, la Zulema, con el traje de Cruz del Norte, la observa desde la distancia.

En el presente (vamos, la trama del hotel), comprobamos una de las teorías que teníamos la semana pasada: Maca (Maggie Civantos) es la confidente de la policía y, efectivamente, ha vendido a Zulema para poder tener una vida y sacar adelante a su hijo que, por lo que parece, es del inspector Pérez, el que mataron en el anterior capítulo. Solo que se da cuenta de que sus planes se han truncado un poco cuando llama a "su amor" y le coge el teléfono su compañero, diciéndole que tienen que hablar. Un poco más adelante descubrimos que los policías no tienen intención de arrestar a Zulema, solo quieren que Maca consiga los diamantes y los reparta entre tres: ella y los dos policías que quedan vivos. Y eso, teniendo en cuenta que el botín lo tiene Zulema, es complicado. Pero cuando la vida de su futuro hijo es puesta en riesgo... Podemos intuir que Maca va a hacer todo lo posible, porque ya no es la misma chica que entró en Cruz del Sur.

También en el hotel hay problemas entre las atracadoras, que se encuentran como en una auténtica despedida de soltera en la piscina del hotel. Zulema no quiere repartir los diamantes hasta que no se hayan marchado del país. Lo que sí que quiere es que Goya (Itziar Castro), que ha sido la que ha traído a la novia hasta el hotel, la mate. 

Mónica, que no está muy por la labor, va a hablar con su hermanastra para explicarle la razón por las que quería vengarse de Ramala: porque mató a sus padres. Sin embargo, Katy no lo ve válido, aunque tampoco puede hacer mucho más, porque Goya y Triana se la llevan para matarla en pleno desierto y, mientras ellas se van en el coche (con una discusión entre las novias en la que podemos ver que Goya quiere de verdad a Triana), Mónica recibe una llamada de Diego, que sabe que ella era la intrusa y quiere que pare todo. Y aunque le dice a su hermano que Katy sigue viva, todavía tendremos que esperar al siguiente capítulo para confirmarlo, porque escuchamos como Goya dispara... Pero no vemos si acierta.

La semana pasada también pudimos ver algo del pasado de nuestras dos ex-presas estrella: Maca y Zulema. Vimos la salida de la cárcel de la segunda y el trabajo de la primera, así que en este nos centraremos en cómo fue la vida de Zulema justo después de la salida. Mientras que la rubia trabajaba en una lavandería, Zulema lo hacía en un túnel de lavado de coches. En las palabras que le dijo al hombre de la oficina de reinserción laboral, sus grandes aptitudes son el manejo de las armas, las herramientas y tener don de gentes. Y parece un trabajo ideal, desde luego... Hasta que algún cliente pone nerviosa de más a la morena y acaba por estrellar su cara contra el coche y robárselo. Zulema no puede cambiar de la noche a la mañana.

Otra de las tramas importantes del hotel (de las que sabíamos más bien poco) es la de la sala de espionaje de las habitaciones. En este capítulo (haciendo un poco de unión con el resumen del siguiente) descubrimos algo más de la madre y el hijo que se encuentran ahí (llamados Ama y Cepo respectivamente). Cuando Cepo (Lucas Ferraro) le pregunta a Ama (Ana María Picchio), mientras espían a Maca, si van a hacer daño a la rubia, su madre le responde que le van a devolver todo el daño que les han hecho... Y es que, por sus palabras (que además del hijo que tiene con ella, tenía otro hijo al que mataron) y por lo que se va a ver próximamente... Los dueños del hotel no son, ni más ni menos, que la familia de Sandoval. En concreto, su madre y su hermano, que buscan venganza por la muerte de su hijo. Y aquí parece que las cosas se van a poner interesantes, porque Sandoval fue uno de los grandes de Vis a Vis.

También en el hotel está ya el marido de Flaca, que va a buscarla. Aunque de momento solo vemos pocas cosas, se entera de que su mujer está malherida por culpa del hijo de la dueña, que le dice que llenó el asiento del coche de sangre. Sin embargo, lo relevante pasa a continuación, cuando Maca va a ver a Zulema y tienen una charla en la que se ve que las mujeres todavía se guardan odio. Zulema sabe que Maca la ha vendido, pero Maca también sabe que no están en El Oasis por casualidad.

Esto se enlaza bastante bien con la trama del pasado de las ex-presas que nos presentaron al inicio del capítulo. Porque Maca, las pocas veces que suele dormir, sueña con Zulema. Y la morena, en cuanto roba el coche, va a ver a la rubia para proponerla asociarse. En esta conversación, ambas se recuerdan todo el odio que se han tenido en el pasado (y que se siguen teniendo), con ejemplos de las cosas que se hicieron en las temporadas de Vis a Vis (intentos de asesinato, matar a familiares...). Entonces parece descabellado que ambas se asocien, pero Zulema da con la clave: el odio es un gran motor para hacerlo. Y, a juzgar por lo que se está desarrollando en el hotel, sigue siendo el motor que las impulsa a ambas.

El final es un poco caótico, pero nos deja impactados. Finalmente la policía acaba llevándose a Zulema y Maca aprovecha eso para intentar irse con Flaca y que la puedan curar. La chica no reacciona y, mientras tanto, su marido va a buscarla. ¿Lo que verdaderamente sorprende? Que cuando al hijo de la dueña se le cae una taza en la sala de espionaje, Maca se pone alerta y, desencajando el espejo de la pared, consigue colarse y ver que todo este tiempo la han estado espiando. ¿Qué medidas tomará ahora que lo sabe?

Parece que con la próxima llegada de los recuerdos de Sandoval, y con las tramas y motivos de las protagonistas para hacer cada cosa, Vis a Vis: El Oasis encuentra su camino. Ahora todo se pone más interesante, y empezamos a empatizar más con algunos de los personajes. ¿Nos sorprenderá más la serie en el siguiente capítulo?