Tras la vuelta de Dean y una discusión sobre la barba de Sam toca que el mayor de los Winchester se aclimate a una nueva vida, a que el búnker esté lleno vida y trajín para arriba y para abajo. Entre tanto se enteran de que Nick se ha ido. Ya sabíamos que algo no iba del todo bien con él y ahora lo vamos a confirmar.
Y mientras investigan eso, se darán cuenta de que Dean tiene unas marcas en el brazo, pero no se sabe de qué. Para eso llamarán a Jody, quien da la casualidad que tiene un caso con unas marcas parecidas entre manos. Entre ellos tres, ya que no dejan ir a Jack, tratarán de averiguar quién está detrás de todo. Descubrirán pronto el modus operandi, el culpable en cuestión corta las cabezas y cuelga los cuerpos.
Tampoco tardarán en encontrar a la culpable: Kaia, quien hace un tiempo dejamos de saber de ella. Se puede decir que no es realmente ella sino su doble del otro lado de la brecha. No entendí muy bien quien más que tiene una lanza que quiere Lucifer porque es una de las únicas cosas que le puede hacer daño. Dean quiere conseguirla también después de ser dañado por ella y eso me lleva a pensar que algo sigue mal con él, aunque no se nos muestra así del todo.
Poco a poco se nos van mostrando recuerdos de cuando Michael estaba dentro e iremos descubriendo qué le pasó. A pesar de que sea muy díficil para Dean hablar siempre esto hace que se abra un poco más a su hermano.
Y mientras investigan eso, se darán cuenta de que Dean tiene unas marcas en el brazo, pero no se sabe de qué. Para eso llamarán a Jody, quien da la casualidad que tiene un caso con unas marcas parecidas entre manos. Entre ellos tres, ya que no dejan ir a Jack, tratarán de averiguar quién está detrás de todo. Descubrirán pronto el modus operandi, el culpable en cuestión corta las cabezas y cuelga los cuerpos.
Tampoco tardarán en encontrar a la culpable: Kaia, quien hace un tiempo dejamos de saber de ella. Se puede decir que no es realmente ella sino su doble del otro lado de la brecha. No entendí muy bien quien más que tiene una lanza que quiere Lucifer porque es una de las únicas cosas que le puede hacer daño. Dean quiere conseguirla también después de ser dañado por ella y eso me lleva a pensar que algo sigue mal con él, aunque no se nos muestra así del todo.
Poco a poco se nos van mostrando recuerdos de cuando Michael estaba dentro e iremos descubriendo qué le pasó. A pesar de que sea muy díficil para Dean hablar siempre esto hace que se abra un poco más a su hermano.
A su misma vez Jack vuelve a sentir que no es necesario y decide irse. Escribe una carta, coge su mochila y decide seguir otro camino. Pero justo antes de salir escucha un sonido que proviene de la habitación en la que se encuentra Castiel ayudando a una chica. Debido a esto o a algún pensamiento benigno que pasa por su cabeza decide no irse.
Estos tienen entre manos un caso de brujas. La chica que está en el búnker está muriendo poco a poco y Jack se da cuenta de que una posible causa es el collar que la misma bruja le dio para recuperar ella su juventud. Y el cuqui de Jack vuelve a salvar a todos de nuevo; aunque al final del capítulo Jack coge su primer resfriado y nos ponemos en los peor.
Pero en el segundo capítulo nos vamos a alejar de todo y vamos a tener un caso como en las primeras temporadas. Esta vez será un caso a lo Toy Story en la que los juguetes cobran vida. Pero no va a ser por otra cosa que por un fantasma resentido.
El miedo y las pelis de terror, más concretamente el hombre del hacha, van a ser los verdaderos protagonistas. Jensen es súper fan de él y vamos a verle disfrutar como un niño pequeño. Muy parecido a él tenemos a uno de los protagonistas, que se toma muy en serio los juegos y el culpable de que el fantasma se enfade. A su vez, Sam encontrará su viva imagen en Samanta, la jefa del otro chico; ambos herederos de una tienda de cómics.
No se puede hablar mucho realmente de este capítulo. Todo se convertirá en una carrera para evitar se cogidos por el hombre del hacha y proteger al herido del hospital. Prácticamente la realidad se convertirá en la película.
Un capítulo de Halloween sencillo, pero de los que nos gustan, que nos traen muy buenos recuerdos y nos sacan una pequeña sonrisa al ver ese factor que ya no vemos tanto. ¿Qué os pareció a vosotr@s?
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