Hemos tenido que esperar algo menos de un año para que la cuarta temporada de la serie española de éxito mundial llegue a Netflix, pero cada vez queda menos. El próximo 3 de abril podremos disfrutar de los ocho nuevo episodios de La casa de papel, y nosotros ya hemos podido ver los cinco primeros. En las siguientes líneas encontraréis la opinión general del inicio de temporada sin spoilers de la cuarta. Sin embargo, si no has visto las tres temporadas anteriores, te recomendamos dejar de leer... O repasar los resúmenes que tenemos disponibles en el blog.
La tercera temporada de La casa de papel acabó con un suceso que dejó a todo el mundo en vilo; la inspectora Sierra, en una jugada (como mínimo, rastrera; aunque inteligente), llevó al hijo de Nairobi (Alba Flores) frente al Banco de España para que su madre se asomase por la ventana. Y Nairobi, que antes que atracadora es madre, picó en el anzuelo, llevándose un balazo en el pecho como regalo.
La situación para los ladrones se complicaba por momentos, con un Profesor (Álvaro Morte) destrozado por la supuesta muerte de Lisboa (Itziar Ituño) y un inminente ataque de los tanques al banco, los Dalís sacaron la artillería pesada y acribillaron los tanques de la policía mientras Nairobi sangraba.
El futuro de la chica quedaba pendiendo de un hilo durante todos estos meses de espera y será ahí donde arranque la cuarta temporada: en el mismo punto donde acabó la anterior. Aunque para ver qué pasa con uno de los personajes favoritos de la serie tendréis que verlo con vuestros propios ojos.
Lo que sí que podemos decir, sin duda, es que los sucesos con los que acababa la tercera temporada tendrán consecuencias para ambos bandos, lo que hará que, durante los dos primeros episodios de la temporada, las cosas sean más calmadas. Después de un ataque tan grande tanto la policía como los atracadores tendrán que repensar estrategias y ver cómo seguir, cada uno, con su plan. Serán capítulos que no siguen tanto el ritmo trepidante de la serie, pero que servirán para profundizar en los personajes y en las relaciones personales que tienen todos ellos.
No es de extrañar, por tanto, que Netflix no haya ofrecido la posibilidad de ver, como ocurrió con la tercera temporada, solo dos episodios. Porque aunque en el episodio tres la acción empieza a ir in crescendo, no es hasta el cuatro y el cinco cuando podemos ver volver a sentir esa adrenalina del atraco y esa tensión que nos hace ponernos rectos en el sofá, a la espera del siguiente movimiento de cualquiera de los bandos.
¿Sigue sorprendiendo? Por supuesto. Que el ritmo sea lento en los dos primeros tiene una explicación lógica y, dado que es una serie que se consumirá preferentemente en un maratón (sobre todo, teniendo en cuenta el confinamiento en el que estamos inmersos), no se tarda en llegar al punto verdaderamente sorprendente de la historia.
Por otro lado, se sigue notando que la serie es cada vez más internacional en los pequeños guiños que meten los guionistas en cada capítulo. Ya pudimos ver en la tercera temporada escenas impresionantes con los zepelines volando por encima de la Plaza de Callao, que dejaba más claro que nunca que la serie es española. Un propósito interesante de cara al visionado internacional, que hará que los fans de la serie conozcan un poco más de nuestra cultura mientras disfrutan de su visionado, pero también puede resultar un poco extraño para los españoles que la vean.
¿Qué más podremos ver en esta cuarta temporada? Como ya hizo la tercera, mantendremos a viejos personajes como Berlín (Pedro Alonso) y Moscú (Paco Tous), que seguirán apareciendo de vez en cuando en los recuerdos de los atracadores. Además, podremos conocer más en profundidad a Alicia Sierra (Najwa Nimri) que, sin duda es uno de los personajes más interesantes de esta nueva tanda de incorporaciones.
Y si hablamos de personajes, uno de los grandes misterios que nos dejó la anterior tanda de capítulos fue una cara conocida: Belén Cuesta. La actriz destacaba en un mar de rehenes desconocidos con apenas un par de planos demasiado fijos, indicándonos que podía ser alguien con cierta importancia en el futuro. Las teorías no tardaron en surgir, y sean acertadas o no, también sabremos más sobre su personaje en esta cuarta temporada. Para mí, sin duda, fue una grata sorpresa (aunque creo que no estará exenta de controversia).
Y si hablamos de personajes, uno de los grandes misterios que nos dejó la anterior tanda de capítulos fue una cara conocida: Belén Cuesta. La actriz destacaba en un mar de rehenes desconocidos con apenas un par de planos demasiado fijos, indicándonos que podía ser alguien con cierta importancia en el futuro. Las teorías no tardaron en surgir, y sean acertadas o no, también sabremos más sobre su personaje en esta cuarta temporada. Para mí, sin duda, fue una grata sorpresa (aunque creo que no estará exenta de controversia).
Llegados a este punto, queda preguntarse si en los tres capítulos que restan (que es donde concluirá el atraco al Banco de España, si siguen los pasos de las dos primeras temporadas) la historia se cerrará completamente o bien dejarán la posibilidad de una quinta temporada con un nuevo atraco. Según lo que respondieron los protagonistas en la entrevista que realizó Film Hunters, nos sorprenderá y puede que haya alguna que otra baja (como ya ocurrió con la muerte de Moscú al final de la segunda temporada de la serie).
Ya queda menos para descubrirlo, pero, sin duda, La casa de papel no defrauda. ¿Qué expectativas tenéis sobre el final de la serie?
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