Después de dos temporadas en Antena 3 y una en Netflix, el 3 de abril se estrena la cuarta temporada de La Casa de Papel. ¡Os resumimos lo que pasó en la tercera por si no os acordáis y queréis refrescar la memoria antes del estreno!
Tras el idílico final, el primer capítulo de la temporada empieza ubicando a los atracadores, ya retirados después de dar el golpe a la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre con éxito, aunque con las bajas de Oslo, Moscú y Berlín. Helsinki (Darko Peric) está de juerga en Latinoamérica con Nairobi (Alba Flores); Denver (Jaime Lorente), después de casarse con la secretaria de Arturito, Mónica Gaztambide (Esther Acebo), disfruta del retiro en un país asiático.
El Profesor (Álvaro Morte), tras el conflicto en las primeras temporadas con la inspectora Raquel Murillo (Itziar Ituño), vive en otro país asiático con la ex-policía, que fue a buscarle un año después del atraco. Y los protagonistas de la historia de amor que encuadra la serie, Tokio (Úrsula Corberó) y Río (Miguel Herrán), viven en una isla paradisíaca su perfecta relación.
Pero, al igual que en las dos primeras temporadas, la relación es más perfecta para Río que para Tokio, que empieza a sentirse atrapada en la isla y quiere recorrer mundo. Habla con Río, que, con el corazoncito destrozado, le dice adiós y le da un teléfono satélite para que se pongan en contacto. Y ahí llega el error: en un teléfono satélite comprado en el mercado negro y pinchado por la policía, que tarda poco en localizar y detener a Río.
La banda vuelve a reunirse con el objetivo de rescatar a Río, que está encerrado en algún país desconocido mientras le torturan para que delate al resto del equipo. Y deciden una estrategia: un atraco ideológico. Van a encerrarse en el Banco de España y contar con la presión social y la opinión pública a recuperar al hacker. Además de Mónica y Raquel, que participan en el robo como Estocolmo y Lisboa, se incorporan Palermo (Rodrigo de la Serna), amigo de Berlín, que planeó el atraco con él y que va a ser el encargado de sustituirle como líder dentro del Banco; Bogotá (Hovik Keuchkerian), ladrón experto en submarinismo y fundición (para poder abrir la cámara acorazada, que se inunda al intentar forzarla); y Marsella (Luka Peros), que distraerá a la policía desde fuera para que no localicen ni al Profesor ni a Raquel.
Pero entrar en el Banco de España no es tan fácil como en la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre, y Palermo no es Berlín, es más insoportable, así que ya se lía en las primeras horas del atraco. Uno de los guardaespaldas del Gobernador del Banco, Gandía, empieza dando por saco (y parece que va a ir para largo, más en la cuarta temporada) y Tokio y Nairobi tienen que lidiar con el conflictivo personaje. Y la pelea termina con Palermo con los ojos llenos de cristales y una operación médica de emergencia, algo que parece que los atracadores van a terminar asumiendo como tradición, porque tienen mínimo dos por robo.
Y hablando de personajes cargantes y molestos... no, Arturito (Enrique Arce) no desaparece después del atraco a la Fábrica como los demás rehenes. Arturito no tiene nada mejor que hacer y se cuela dentro del Banco después de hablar con la policía para recuperar a Mónica, hacerse el héroe y terminar él solito con el atraco, una idea que también tiene Gandía.
Fuera del Banco también hay problemas. El coronel Prieto, todavía amargado con el atraco a la Fábrica, le cede el testigo a un compañero del CNI, el coronel Tamayo (Fernando Cayo), que rompe los esquemas del Profesor saltándose el protocolo y organizando una entrada a la fuerza en el Banco mientras esperan a que vengan los refuerzos, en concreto, la inspectora Alicia Sierra (Najwa Nimri), que es la encargada de torturar a Río.
Pero, justo antes de que entren a sacarles del Banco de España a la fuerza, Bogotá y Nairobi consiguen forzar la cámara acorazada y sacan los secretos de Estado. Tamayo cancela el ataque, y Sierra, que no está dispuesta a caer en el chantaje de la banda, filtra varios secretos junto con algún que otro bulo a la prensa para que pierdan esa baza.
Entre los atracadores también hay conflictos, como en las dos primeras temporadas. Nairobi tiene una bronca con Palermo (parecida a la que tuvo con Berlín en la Fábrica), y terminan discutiendo por Helsinki, que está colado por Palermo, y Palermo sabe que Nairobi está enamorada de Helsinki. Nairobi le dice que es un cobarde porque nunca reconoció lo que sentía por Berlín y se declara a Helsinki, a pesar de que no es correspondido. Y, cuando consiguen por fin que vuelva Río, Tokio se lleva un chasco grande porque Río corta con ella.
El Profesor y Lisboa, a cargo de las cámaras y de la comunicación con el interior del Banco, tienen que huir del ex-compañero de Raquel, Ángel (Fernando Soto), que les sigue muy de cerca. Para ayudarles, Palermo inicia el plan "Flipper", y hacen creer a la policía a través del micrófono que le han sacado a Río que están huyendo del Banco en lancha. La policía manda la mayor parte de sus recursos a perseguirlos y el Profesor y Lisboa aprovechan para despistarles.
Pero la tranquilidad no les dura demasiado. Pierden conexión con el interior del Banco y Ángel y Suárez siguen persiguiendo al Profesor y a Raquel, que terminan en medio del bosque. El Profesor consigue seguir el plan y esconderse encima de un árbol, pero Raquel no, y termina en la casa de unos granjeros, donde los policías juegan la misma baza que el Profesor para desestabilizar a los atracadores: hacen creer al Profesor a través del micrófono de Raquel que la han matado.
Dentro del Banco, Sierra lleva al hijo de Nairobi para que la atracadora se asome a la ventana y, desde allí, un francotirador la dispara. Helsinki y el equipo van corriendo a por ella e intentan tapar la herida, pero tienen más problemas: aprovechando la inestabilidad de la banda, los agentes van a intentar otra vez entrar a la fuerza en el Banco.
Y ahí el Profesor, hundido porque no sabe que a Raquel la tiene la policía, comete el primer error durante un atraco en las tres temporadas: le dice al equipo que saque la artillería pesada y vaya con todo a por los tanques para detener el ataque. El último capítulo termina con los atracadores disparando a los agentes y ambos bandos destrozados, tanto los atracadores por haber tenido que disparar como la policía por el desenlace de su plan.
A ver cómo arreglan el Profesor y la banda el atraco después de su paso en falso y el de la policía. Pero la pregunta respecto a la nueva temporada es: ¿qué va a pasar con Raquel y Nairobi? Y, ¿quién es el personaje de Belén Cuesta, una de las rehenes cuyo plano destaca entre tanto conflicto en el último capítulo? Habrá que esperar al estreno en Netflix el viernes 3 de abril para ver cómo lo arreglan y si consiguen una temporada aún mejor que la tercera.
A ver cómo arreglan el Profesor y la banda el atraco después de su paso en falso y el de la policía. Pero la pregunta respecto a la nueva temporada es: ¿qué va a pasar con Raquel y Nairobi? Y, ¿quién es el personaje de Belén Cuesta, una de las rehenes cuyo plano destaca entre tanto conflicto en el último capítulo? Habrá que esperar al estreno en Netflix el viernes 3 de abril para ver cómo lo arreglan y si consiguen una temporada aún mejor que la tercera.
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