miércoles, 31 de mayo de 2017

Norman, el hombre que lo conseguía todo, Joseph Cedar








Título original: Norman: The Moderate Rise and Tragic Fall of a New York Fixer
Director: Joseph Cedar
Año: 2016
Duración: 117 min.
Género: Drama
País: Estados Unidos
Actores: Richard Gere, Lior Ashkenazi, Michael Sheen, Charlotte Gainsbourg, Dan Stevens, Steve Buscemi, Jonatahn Avigdori, Yehuda Almagor, Miranda Bailey, Jay Patterson.



Trailer:


¿Por qué ver Norman, el hombre que lo conseguía todo?
• La actuación de Richard Gere hace que nos creamos toda la película.
• Es una buena reflexión sobre la fama y los contactos.
• ¿Lo malo? Peca de ser un poco aburrida.

Quizá si hubiese leído el título en inglés antes de ver esta película hubiese sabido que esperarme: tan largo que te lo dice todo. Creo que esta es una de las pocas veces en las que la traducción tan poco semejante le hace un flaco favor a la película, manteniendo un poco esa intriga que esta pretende conseguir. Porque seamos sinceros, si sabemos cómo acaba lo mismo no nos quedaríamos pegados a la pantalla toda la duración de la misma.

La película trata sobre Norman Oppenheimer (Richard Gere), un hombre que poco tiene que ver con el padre de la bomba atómica. Tiene un apellido fácilmente reconocible y un ¿trabajo? dudoso. Es una especie de charlatán que busca codearse con las altas esferas de la sociedad. Y, sobre todo, es un fracasado muy, pero que muy pesado. 


Norman, en uno de estos intentos por codearse con gente importante, acaba relacionándose con Micha Eshel (Lior Ashkenazi), un alto cargo del gobierno israelí que no tardará en alcanzar lo más alto y Norman espera que eso le repercuta algún beneficio pero, ¿será bueno o malo?

En realidad, como he dicho al principio, el título lo dice absolutamente todo. La película es una crítica sobre el éxito y las redes de contactos. Y una película, en cierto modo, sobre lo dudosa que puede resultar una amistad cuando alcanzas la fama. Sin duda, esta crítica es lo mejor de toda la película.

Nos ayuda a comprender mejor esta crítica la brillante actuación de Richard Gere como este charlatán pesado y fracasado. Sin duda, se desmarca de su mítico papel en Pretty Woman. Michael Sheen también está muy bien en su papel y, sin embargo, actores como Dan Stevens se conforman con un papel quizá demasiado modesto que no les permite mostrar su potencial.


El filme tiene aspectos muy buenos, como determinada forma de contar algunas partes del mismo (las conversaciones finales en las que parece que las dos personas están en el mismo lugar pero a la vez se ve que no, son un ejemplo), y la división en actos del mismo hace que sea menos tedioso... Pero no del todo. La película es larga y, aunque se deja ver, llega a un punto de ser aburrida. Es de esas películas para ver una vez, quedarte con su enseñanza... y ya. No es memorable.

Quizá, lo que más me molestó de la película es que se centra demasiado en la crítica y deja un poco de lado cuestiones como a qué se dedica Oppenheimer, cosa que me tuvo perdida de principio a final. En algunos puntos, además, es hasta predecible. Y, aunque se haga aburrida, no es culpa del ritmo, que parece correcto y que se intenta apoyar en los actos en los que está dividida para darle dinamismo.


Resumiendo: Norman, el hombre que lo conseguía todo, es una de esas películas que te invitan a la reflexión pero que no perduran en tu memoria. Intenta ser cómica, crítica y entretenida, aunque se queda un poco a medio camino en algunas de ellas. Si te gusta el cine reflexivo y te importa poco la trama, te gustará. Si necesitas saber hasta el mínimo detalle de las películas para disfrutarlas y no soportas lo predecible... Quizá no sea tu película.

Si queréis ver Norman, el hombre que lo conseguía todo, podréis hacerlo a partir del día 2 de junio en cines.

Puntuación:

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