martes, 14 de marzo de 2017

The Walking Dead 7x13: Bury Me Here

Quedan tres capítulos para el final de temporada, y todo parece indicar que nos espera un final fuerte. Porque sí, los diferentes personajes se están preparando para la lucha.

Este capítulo ya, desde el comienzo, sabemos que va a ir sobre El reino y, más concretamente, sobre Carol y Morgan, los dos personajes que se niegan a matar de nuevo. Ambos saben luchar, tienen un historial bastante interesante de muertes a sus espaldas pero, por motivos de la vida, han acabado pasándose al lado pacifista... En un mundo lleno de zombies y de gente como Negan que... Bueno, no hace falta explicar cómo es la gente de Negan.

Podríamos esperar un capítulo de estos dos tirando bastante a definición de personajes y, sobre todo, a que nos hiciese comprender un poco mejor su decisión (más bien que nos hiciesen reflexionar sobre ello). Pero nada más alejado de la realidad.


A Carol la conversación que tuvo con Daryl, en la que este le mintió, diciéndole que habían derrotado a Los Salvadores, le hizo dudar hasta tal punto que coge rumbo a El reino (demostrando lo badass que es por el camino, cargándose a un par de zombies) para preguntar a Morgan. Hay cosas que no encajan en la historia, claramente, y ella quiere saberlas. Pero Morgan es fiel a los suyos y mantiene silencio: tiene que contárselo Daryl.

De Carol, evidentemente, pasamos a Morgan y su vida en El reino como persona rehabilitada. Él intenta enseñar el arte del palo (si, no recuerdo el nombre) no solo a Benjamin, el joven guardia real, sino a su hermano. De hecho, los hermanos para él se han convertido casi en un sustituto de su hijo, al que perdió prácticamente al empezar. Y, en este capítulo podemos conocer principalmente un poquito más al personaje de Benjamin.

Ya sabéis qué ocurre cuando hay escenas tan tiernas en TWD.
Otro personaje que nos tenía un poco perturbados dados sus intentos de asesinato hacia Carol, era Richard. Fue amenazado por Daryl, pero aún así parece que trama algo mientras cava una tumba. No tardamos en descubrir que, además de eso, creó una distracción para que cuando él, Ezekiel, Morgan y el resto fueran a llevar unos melones a Los Salvadores, se liara parda. Entre estas cosas, cavó una tumba con un cartel en el que ponía "entiérrame aquí".

Y ocurre. El grupo llega tarde y con un melón de menos. Los Salvadores se cabrean y, haciendo alarde de su paciencia infinita y, para mostrarles cómo son las cosas (por si se les había olvidado), el que le robó el palo a Morgan la semana pasada, dispara a Benjamin en una pierna.

Da igual lo rápido que intenten llegar a la casa de Carol, la más cercana adonde se encuentran, porque el chico se está desangrando y, cuando llegan, es demasiado tarde. Benjamin ha muerto y todos parecen devastados por la noticia.


Morgan, en concreto, se vuelve loco. Podemos ver como rememora todos los momentos turbios de su pasado (de antes de que Rick volviera a encontrarle, con todos los carteles de que tenía que limpiar el mundo). La verdad es que esta escena es realmente buena y, sin decir nada, podemos saber más de lo que siente Morgan en ese momento que de cualquier otra forma. Mediante esta escena, además, él se da cuenta de que Richard es el que lo ha liado todo y va a hablar con él.

Richard le dice que pensaba que él iba a ser quien iba a morir, y que así lo iba a preparar todo. Pero ahora tenía una misión: lanzar al ejército de Ezekiel contra Los salvadores.

Al día siguiente Morgan y los demás vuelven a ir a llevar el melón que les faltaba a Los salvadores. Ellos se dan cuenta de que Benjamin ha muerto y, aunque parece que las cosas se iban a liar por parte del grupo de Negan, es Morgan el que tuerce los acontecimientos asfixiando a Richard con sus propias manos. Con esto, indica dos cosas: uno, le hace ver la verdad a Ezekiel; y dos, les hace ver a Los salvadores que está de su parte.

Por si no recordábais a este señor, es Richard. Al que luego Morgan acaba enterrando, haciendo un buen acto de fe.
Por supuesto, esto no es más que una treta. Morgan está más que cabreado. Lo de Benjamin ha sido para él lo que la muerte de Glenn para Rick. Así que, haciendo alarde de su cabreo monumental, va a ver a Carol y le dice lo que pasó en Alejandría: que Negan mató con su bate a Glenn y Abraham (en TWD están dispuestos a hacernos llorar con cada capítulo). Carol al principio no se lo cree pero, cuando le va contando lo que sucedió a continuación y los planes de Rick, Carol toma una decisión: va a volver a El reino porque tienen que prepararse para luchar. Ezekiel, lejos de tacharla de loca, asiente. No será hoy, pero lucharán.

El capítulo acaba con Morgan afilando su palo, preparándose para lo que toca, que no tiene nada que ver con la técnica empleada hasta ahora: a partir de entonces, tendrá que luchar buscando hacer daño de verdad.


Sin duda, un capítulo sorprendente que ha supuesto un cambio total en la figura de estos dos personajes y que, sin duda, los ha sabido definir a la perfección. Ahora no cabe duda de que la lucha se acerca, aunque con tantos frentes abiertos, tanta gente dolida, y un enemigo tan fuerte, cuesta todavía creer que consigan una unión tan consistente como para acabar con Negan. Realmente parece que Negan no va a terminar con esta temporada, pero sin duda, nos dará un buen espectáculo final. Recordemos que El gobernador duró dos temporadas prácticamente. ¿Creéis que Negan le superará? ¿Queréis que así sea?

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